La Alpujarra es uno de los enclaves con más encanto de la provincia de Almería, que acoge decenas pequeños pueblos y enclaves de población repletos de historia y belleza. Uno de estos núcleos es el de Padules, conocido no solo por sus calles estrechas y tiípicamente alpujarreñas, sino porque en sus inmediaciones se esconden los Canales de Padules. Se trata de un tramo de aproximadamente dos kilómetros de longitud en el que la erosión del agua del Río Andarax ha formado pequeños recovecos a modo de piscinas naturales que separan Sierra Nevada de la Sierra de Gádor.
La distancia desde Guadix a este lugar es de 75 kilómetros aproximadamente y el recorrido en turismo no superior a los 70 minutos. Para acceder a los Padules tomar la A-348 entre las localidades de Almócita y Canjáyar y seguir los indicadores que se encuentran en la misma.
La visita se puede realizar en cualquier época del año, pero en todas las estaciones Los Canales de Padules ofrecen imágenes naturales de singular belleza
