Conjunto de cuatro capiteles del patio principal

Anónimo

  1. XVIII

Piedra caliza  tallada

40 x 52 cm Ø aprox.

En el patio principal de la casa se conservan un conjunto de bellos capiteles corintios. El patio está porticado y consta de cuatro columnas, dos de ellas exentas y dos medias columnas  semiadosadas a pilares de ladrillo enlucidos -o más bien embutidas-,  dejando ver un único de sus frentes.

Capitel 1Capitel 2

Las columnas tienen capiteles corintios  completos (con collarino y ábaco), si bien habitualmente a este orden clásico le suele acompañar un fuste de columna estriado, en este caso se trata de fuste liso, sin terminación pulida de la superficie, en la que fácilmente se aprecian las marcas de la herramienta de trabajo del cantero.

Sobre los capiteles  se asientan cuatro canes tallados con decoraciones vegetales, sobre los que apoyan a su vez las vigas que conforman y sostienen  las galerías del piso principal del patio de la casa.

Capitel 3

Las columnas exentas se encuentran a ambos lados de la entrada principal y dejan a la vista del que accede en caras enfrentadas escudos heráldicos de la familia propietaria de la casa tallados en su centro, aparecen las armas de la familia Molleto Terracina y  las de los Pérez Pastor, heráldicas que se repiten en las pinturas murales de la escalera.

Tradicionalmente se venía considerando este inmueble como la residencia solariega de la familia Arias de Medina construida durante el siglo XVI y muy reformada en siglos posteriores.  Los estudios clásicos sobre la Guadix monumental realizados en su mayoría por el historiador accitano Carlos Asenjo, situaban en época medieval la existencia de un cementerio  o macaber en este espacio urbano. Asímismo, y siguiendo a Asenjo,  se consolidó la creencia de que la casa había sido edificada por la familia Arias de Medina, afirmación resultante del estudio de las heráldicas presentes en el palacio, tanto en los capiteles de las columnas del patio como en las pinturas murales de la escalera principal.

Fundado en esta creencia y ya que el establecimiento de esta noble familia en Guadix tuvo lugar en el siglo XVI, se consideró el edificio como obra del quinientos construida en estilo mudéjar, ya que la mayor parte de la fábrica se realizó en ladrillo. Posteriormente la historiografía local dio validez al análisis heráldico de Asenjo y a la cronología del edificio.

Investigaciones del profesor Rodríguez Domingo, basadas principalmente en la documentación conservada en el Archivo de Protocolos Notariales de Guadix, concretamente el referenciado como “XVIII-61. Fundación de Mayorazgo hecha por Don Fernando Vicente Pastor e Doña Isabel Molleto Cruzat, ante Francisco Antonio Bonilla (Guadix, 29 de agosto de 1728), fol. 325” y en las referencias catastrales de la época conservadas en el Archivo Histórico Provincial de Granada, evidencian que el inmueble fue edificado por los Pérez Pastor en las primeras décadas del siglo XVIII.

Este edificio fue la residencia solariega de la familia que como bien señala el profesor Rodríguez Domingo, se convirtió en cabecera de diferentes explotaciones agrícolas en la comarca de Guadix, entre la que destaca el Cortijo Almídar, situado en la cercana localidad de Fonelas, y dedicado al cultivo del cereal de secano, y cuya fachada está presidida por el escudo de los Molleto Terracina.

La ocupación de la casa por miembros de la familia Pérez Pastor se mantuvo de forma intermitente hasta 1813, fecha en la que según las investigaciones del profesor Rodríguez Domingo, habitaría la casa por breve espacio de tiempo un miembro de esta familia, que vendió las propiedades ya a finales del siglo XIX a los Condes de Belalcázar.

La casa sin embargo, ya en pleno siglo XX, era propiedad de la Familia Igual, administrada lo mismo que  el Cortijo Almídar por Don Francisco Rodríguez Peinado, a cuya muerte le sucedió en la administración de las propiedades su hijo Don Emilio Rodríguez Díaz. Tras su fallecimiento en 1971 la casa fue adquirida por Don Julio Visconti, que la rehabilitó y habitó hasta la actualidad. En el año 2009 se constituyó la Fundación Pintor Julio Visconti que recibió como dotación fundacional el inmueble como sede y su contenido mueble atesorado durante años por Visconti.